Compañía u otro grupo de personas que trabajan juntas como un servicio de emergencias médicas.

Persona que recibe atención médica, o que es atendida por un profesional sanitario en particular cuando es necesario.

Pacientes que sufren una inestabilidad orgánica, estructural o funcional y están en situación de riesgo vital real o potencial; o bien sufren un fallo de uno o más de un órgano vital.

Es una pérdida repentina de flujo sanguíneo derivada de la insuficiencia del corazón para bombear eficazmente. Los signos incluyen, entre otros, pérdida de conciencia y respiración anormal o ausente.

Situación en la que el corazón deja de latir de forma repentina e inesperada. Si esto sucede, la sangre deja de fluir al cerebro y a otros órganos vitales. La parada cardiaca súbita suele causar la muerte si no se trata en minutos.

Una persona u organización involucrada en la firma del contrato. Normalmente se compone de un proveedor y un cliente con derechos y responsabilidades compartidos.

Enfermedad o lesión que se manifiesta a través de síntomas agudos de suficiente gravedad (incluido el dolor intenso) como para que exista la probabilidad de que la ausencia de atención médica inmediata dé lugar a: i) poner en grave peligro la salud de la persona, ii) un grave deterioro de las funciones corporales, o iii) una grave disfunción de cualquier órgano o parte del cuerpo.

Empresas con menos de 250 empleados, con una facturación inferior a 50 millones de euros.

Personas que son responsables de alguna manera de gestionar un servicio de emergencias médicas.